El Ayuntamiento eleva hasta los 57.000 euros su
partida presupuestaria para esta iniciativa de apoyo formativo y económico al
alumnado
El
teniente de alcalde y concejal de Promoción Cultural de Los Realejos, Adolfo
González, y la concejala de Educación, Sandra Pérez, mantuvieron en la tarde de
este lunes 23 de enero una reunión de coordinación con el grupo de 14 beneficiarios
de las becas que el Ayuntamiento ofertó para este 2017 a estudiantes
universitarios para desarrollar tareas de dinamización y promoción
bibliotecaria y cultural en espacios públicos de la localidad.
“Por
vez primera se conceden un total de 14 becas de este tipo, incrementándose así
la partida municipal hasta los 57.000 euros”, explicó Sandra Pérez, quien
detalló que “los becarios llevarán a cabo su labor distribuidos entre las
bibliotecas, salas de estudio, Casa de la Cultura, Casa de la Juventud, las
bibliotecas de los colegios CEIP Toscal Longuera, CEIP Palo Blanco y CEO La
Pared, además de las instalaciones deportivas de estos dos últimos centros”.
“Estas
becas municipales tienen el objetivo de ayudar a los estudiantes universitarios
en dos vertientes, por un lado para que puedan adquirir una nueva experiencia
formativa en el ámbito de la biblioteconomía y la dinamización cultural,
educativa y deportiva, y por otro como línea de apoyo económico familiar para
que puedan seguir desarrollando sus estudios”, indicó el alcalde de Los
Realejos, Manuel Domínguez.
Durante
la reunión de este lunes se establecieron los horarios y se detallaron las
características y funciones a desarrollar en las diferentes instalaciones
públicas en las que llevarán a cabo las acciones de promoción objeto de la
propia beca. “Con ello se logra además reforzar los servicios públicos y de
atención ciudadana directa o indirecta a través de actividades en los
diferentes espacios municipales”, expuso Adolfo González.
El
concejal de Promoción Cultural recordó que “en 2011 estas becas municipales
para universitarios se dirigían a un total de 8 beneficiarios, incrementándose
en 2012 a 10, en 2014 a 13 y en este 2017 a 14 becarios, lo que demuestra que
este equipo de gobierno ha apostado no sólo por la consolidación de la
iniciativa, sino casi por duplicar su alcance”.
Los
universitarios solicitantes de estas becas se sometieron al baremo de una serie
de requisitos estipulados en las bases reguladoras donde se valoraron los
recursos económicos familiares, la experiencia en la realización de prácticas
en centros culturales y educativos, la participación en actividades
socioculturales, los cursos de formación en animación y dinamización
sociocultural y biblioteconomía y los conocimientos informáticos, entre otros
criterios de priorización.
Según Sandra Pérez,
“además de ofrecer un apoyo complementario al trabajo del personal municipal,
estos universitarios, al final del período de disfrute de la beca, tienen que
hacernos llegar una memoria de las actividades desarrolladas y de propuestas a
incluir con el fin de mejorar nuestros servicios municipales, algo que nos ha
servido de mucha ayuda a lo largo de estos años”.
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