Las instalaciones cuentan con aula formativa, jaula de simulacros o un gimnasio entre otras dependencias, preparadas para formar también a otros colectivos
Los Bomberos Voluntarios de Los Realejos están a punto de concluir una obra efectuada íntegramente por los componentes de dicho colectivo, consistente en un centro de formación y entrenamiento en emergencias. Se trata de unas completas instalaciones que cuentan con gimnasio, aula de formación, foso, jaula de entrenamiento y cubo-contenedor de fuego. Los integrantes de este colectivo presentaron al alcalde realejero, Oswaldo Amaro Luis, la nueva infraestructura quien, en una visita reciente a la sede, acompañado por la concejala de Protección Civil, Luisa Salazar, elogió la iniciativa y subrayó que de esta manera “los bomberos voluntarios pueden estar preparados para cualquier contingencia, al tiempo que ofrecer sus dependencias a otros colectivos para la formación en este ámbito”.
El centro de formación y entrenamiento en emergencias se ubicada en la sede de los Bomberos Voluntarios realejeros, a un nivel más alto que el resto de las instalaciones y se distribuye en dos pisos. El primero se ha habilitado como sala de conferencias con la intención de albergar charlas con las que ofrecer la formación teórica. El segundo es una planta diáfana de más de 50 metros cuadrados, en los que han instalado una jaula de entrenamiento. Esta estructura, constituida por un enrrejado está compuesta por múltiples módulos transformables y que permiten su adaptación a las necesidades de entrenamiento, configurando un verdadero laberinto.
Este espacio, está habilitado y preparado para acoger simulacros de un incendio mediante la emisión de humo, al tiempo que deben de superar los obstáculos que suponen las diferentes alturas y dimensiones en las que están dispuestas cada reja, simulando así las barreras que deben de superar en una situación real de emergencia.
“Esta jaula es la segunda mayor que existe en la Isla y la más grande del Norte” explicó José León, vicepresidente y jefe del Parque de los bomberos voluntarios realejeros.
Las nuevas instalaciones permiten realizar un completo entrenamiento pues a la dotación mencionada se añaden salientes en dos esquinas de la nave que se encuentran a varios metros de altura. Estas cuñas permiten realizar prácticas de rescate de montaña en altura y la posibilidad de trasladar un herido en camilla suspendido en el aire mediante cuerdas. De igual manera, los bomberos voluntarios de Los Realejos, trabajan estos días en la instalación de un cilindro de grandes dimensiones que les servirá para entrenarse en el supuesto de tener que rescatar a un accidentado dentro de un pozo.
Por último, en el solar anexo a las dependencias de los bomberos se ubicará un contenedor convenientemente preparado para realizar simulacros de extinción de incendios con fuego real.
Formación a colectivos.
El nuevo centro de entrenamiento estará listo para estrenar en apenas unos días y según manifestó José León “no sólo nos servirá para entrenarnos en supuestos que se nos planteen en la vida real y estar preparados para cualquier contingencia, manteniendo nuestra forma física, agilidad y capacidades al día además de los conocimientos teóricos necesarios, sino que de estas instalaciones podrán beneficiarse muchos profesionales de diferentes sectores y vecinos de todo el Norte e incluso de toda la Isla”.
Las instalaciones están preparadas para acoger cursos de formación en actuación de emergencias para profesionales de distintas ramas como el de la hostelería. De hecho, los responsables de los bomeros voluntarios de Los Realejos adelantaron que ya han cerrado varias charlas formativas y horas de prácticas con hoteles ubicados en el Puerto de la Cruz, “con la intención de ofrecerles detalles de cómo actuar en materia de emergencia”.
Por último, adelantaron su intención de ofrecer formación en este ámbito a los más pequeños para lo cual mantendrán reuniones con los centros docentes del municipio y organizar visitas a su sede.
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